¡Hola a todos!
En la entrada de hoy os traigo el tercer libro de la “Saga Valeria” de Elisabet Benavent, titulado “Valeria en blanco y negro”. En este libro, vemos como la vida de las protagonistas sigue teniendo algunos giros un poco inesperados.
Por una parte, tenemos a Carmen que va a terminar formalizando su relación con Borja, a pesar de que la madre de él no está muy convencida de que ella sea la mujer adecuada para su hijo y se verá envuelta en bastantes discusiones por este asunto. Es algo que, normalmente, se suele dar bastante en la realidad y que veremos cómo acaba la historia…
En cuanto a Nerea, toma bastantes decisiones que acabarán cambiándole la vida. Una de ellas, es querer organizar la boda de Carmen, haciendo que se replantee su carrera profesional y cuya decisión le cuesta la relación con su familia, pero la que tiene que tomar las decisiones sobre lo que quiere o no en la vida es una misma asique termina dándose cuenta de que no puedes hacer las cosas que tus padres quieran por el simple hecho de no darles disgustos, hay que hacer lo que tú quieras sin tener miedo a las regañinas de los padres. A parte, vemos que va a cambiar también bastante su forma de ser y de comportarse, algo que nos va a sorprender bastante.
Por otra parte, la vida de Lola comienza a sufrir algunos cambios. Tras su ruptura con Sergio decide ocupar su tiempo libre con hobbies y donde acaba conociendo a un chico muy agradable para ella, pero no acaba dejándose llevar porque le da bastante importancia a la diferencia de edad entre otras cosas. ¿Conseguirá finalmente dejarse llevar sin importarle lo que digan o piensen los demás sobre su amigo especial?
Y finalmente, tenemos a Valeria. Valeria y sus capítulos intermitentes con Víctor. Ella intenta seguir con su vida lejos de él, conoce a otro hombre, Bruno y queda con él, pero se da cuenta de que comienza a encontrarse un poco desubicada porque no deja de pensar en Víctor. Todo le preocupa acerca de Víctor y de lo que él hace y deshace con las demás… ¿Retomarán la relación o le pondrán el punto y final definitivo?
Mención especial quiero hacer a Víctor, la verdad que siempre me ha caído mucho mejor que Adrián y le consideraba un gran chico para que Valeria comenzara a sentirse querida y deseada por los hombres de nuevo, pero hay capítulos que me han dolido bastante por la pobre Valeria aunque ella tampoco se queda atrás en otros aspectos.
Si analizo el comportamiento de Victor y de Valeria por separado y los sentimientos que ambos tienen con otras personas, ella con Bruno y el con Cristina, nos acabamos dando cuenta que al final son un par de idiotas que están perdiendo el tiempo por separado y con las personas equivocadas, pero veremos a ver qué sucede en la entrega final de esta maravillosa saga.
La verdad que es una saga que me está haciendo sentir bastante con las historias de las cuatro y, en ningún momento, me está pareciendo pesada como me pasó con otra saga. Me está empezando a gustar bastante esta escritora y, seguramente, la acabaré colando entre mis escritoras favoritas.
¡Un saludo a todos!
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