¡Hola a todos!
Como ya
sabéis, actualmente, el país está pasando por una situación de bastante anormalidad:
Un Estado de Alarma sanitaria como no se había visto en ninguna otra ocasión,
asique la entrada de hoy, no puede ser otra que mi opinión sobre lo que está
sucediendo en los últimos días sobre el coronavirus.
Primeramente,
reconozco que, al principio de todo esto, fui una de las muchas personas que le
quitamos importancia al asunto ya que, también, una de las ministras de este
gobierno dijo a finales de febrero que este coronavirus no tenía importancia
que era una simple gripe y que no se tomarían medidas al respecto, que no había
de qué preocuparse.
A medida que
han ido pasando los días y que empiezas a ver cómo el número de casos en tu
país aumentan diariamente, concretamente, en la Comunidad Autónoma donde vives
y que empiezan a haber los primeros casos de fallecidos por coronavirus, te das
cuenta que el Gobierno de tu propio país te ha engañado (como todos los
políticos) y que esto es muchísimo más serio de lo que ellos advertían.
Aún así, las
fronteras de nuestro país seguían abiertas a todo aquel que quisiera salir o
entrar en él mientras que, en Italia, ya nos llevaban dos semanas de ventaja
con el confinamiento en sus casas. Seguramente, cuando veíamos las noticias de
lo que allí estaba sucediendo, nos podría parecer exagerado y no imaginábamos
que en pocos días acabaríamos como ellos.
El 14 de
marzo, el Presidente del Gobierno, decretó el Estado de Alarma para el país pero
con una de las siguientes medidas: “Se suspende la apertura al público de los
locales y establecimientos minoristas, a excepción de los establecimientos
comerciales minoristas de alimentación, bebidas, productos y bienes de primera
necesidad, establecimientos farmacéuticos, médicos, ópticas y productos
ortopédicos, productos higiénicos, peluquerías, prensa y papelería, combustible
para la automoción, estancos, equipos tecnológicos y de telecomunicaciones,
alimentos para animales de compañía, comercio por internet, telefónico o
correspondencia, tintorerías y lavanderías. Se suspende cualquier otra
actividad o establecimiento que a juicio de la autoridad competente pueda
suponer un riesgo de contagio.” (Copiado del BOE)
Medidas que,
al fin y al cabo, han tenido bastantes críticas por parte de la sociedad como
es el caso de las peluquerías, ya que este gremio consideraba que “hacerse unas
mechas” no es de primera necesidad, ni que tampoco podían mantener la distancia
de seguridad entre las personas en su trabajo, etc… Finalmente “ganaron la
batalla” y se les permite que estén cerradas mientras que el resto de comercios
siguen abiertos cuando, también, podían ponerse “en pie de guerra” a defender
sus derechos de por qué deberían permanecer cerrados.
Por ejemplo,
yo trabajo en una empresa de comercio por internet y mucha gente cree que no
estamos expuestos porque no recibimos clientes presenciales pero sí que tenemos
que recibir mercancía de proveedores que se encuentran fuera de nuestra Comunidad
Autónoma y de nuestro país y que sale hacía las casas de nuestros clientes.
Sí, ya han
dicho que el virus fuera del cuerpo humano no sobrevive más de cinco días, pero
hay gente que toca esa mercancía en las fábricas, transportistas que cogen esos
paquetes, mis compañeros tienen que enviarlos hacía los clientes, nuevamente
vuelve a pasar por los transportistas hasta que, finalmente, le llega al
cliente que se encuentra aburrido y confinado en su casa y que no ha tenido una
mejor idea que realizar una compra on-line sin saber que está exponiendo a los
trabajadores de éstas empresas.
Entiendo que
habrá mucha gente que me critique y piense que no estoy valorando que yo, a día
de hoy, sigo trabajando, cosa que no pueden hacer muchas personas porque han sido
afectadas por un ERTE. Sí, estoy trabajando y, por supuesto, que lo valoro pero,
también, me estoy exponiendo al contagio al tener que salir a la calle tocando
botones de ascensor, manecilla y la puerta del portal, etc… Cosa que tampoco
estáis valorando los demás.
Al final, te
acabas planteando… ¿Qué es más importante en estos momentos para todos: si
salir a trabajar exponiendo tu salud y tener dinero a final de mes o quedarte
en casa con salud y sin dinero a final de mes? Es como la típica pregunta de ¿A
quién quieres más: a papá o a mamá? Reflexionen porque esto no está siendo fácil
para nadie, ni para los que tenemos que salir a trabajar exponiendo nuestra
salud, ni para los que os estáis quedando en casa pensando
en los gastos y en las deudas que tenéis que afrontar sin trabajar.
Solo os digo
que llevamos una semana de confinamiento (quien lo esté cumpliendo totalmente,
en la medida de lo posible) y, todavía, hay gente que se lo está tomando a broma,
saliendo a la calle a pasear con una bolsa de plástico, saliendo a hacer
deporte, yendo a la compra tres veces al día, sacando al perro catorce veces al
día, no respetando la distancia de seguridad con las personas y saltándose las
normas.
Señores…
¡Esto NO es ningún juego! ¡Esto es muchísimo más grave de lo que la señora Ministra
dijo en un principio! Lo peor de todo esto, no es el hecho de que nos hayan
engañado y no se hayan tomado medidas antes, lo peor es que, a día de hoy,
llevamos ya más de 1.300 fallecidos, casi 25.000 personas contagiadas (desgraciadamente
conozco gente de los dos grupos) y casi 2.500 recuperadas en nuestro país que,
aunque digan que es el dato de la esperanza, me siguen pareciendo pocas en
comparación con la cifra de personas contagiadas que no sabemos si fallecerán
(lamentablemente, en muchas de ellas, será así) en los próximos días.
Está en
nuestra mano frenar el número de contagios con un gesto tan sencillo como es quedarse
en casa. ¿Cuántas veces habéis pensado: “Necesito limpiar a fondo mi casa”, “Terminar
de ver tal serie”, “Empezar tal libro”, “Hablar con tal amiga que hace tiempo
que no hablo”? Todos hemos dejado de lado ese tipo de ocio por tema laboral,
ahora, ya no tenemos excusa y tenemos la oportunidad de poder hacerlo asique…
¡Hagámoslo! ¡Por el bien de todos!
Tenemos que
empezar a ser conscientes que cuanto más tiempo estemos en casa, antes se acabará
la curva de contagios, antes podremos salir a la calle y rehacer nuestra vida.
No sabemos las semanas que nos quedan así, pero en China lo han podido hacer en
siete semanas e incluso ya tienen vacuna para el coronavirus, quizá es el único
dato que nos da un poco más de esperanza en estos momentos.
Desde aquí,
le doy mi máximo apoyo a todos los sanitarios que, principalmente, se están
dejando las fuerzas en ayudar a las personas contagiadas, teniendo que ver
imágenes de hospitales saturados en primera persona y teniendo que tomar
decisiones difíciles sobre ellos. También, a las personas que trabajan en las
cadenas de alimentación, transportistas y a todas las personas que seguimos
trabajando día a día para que el país no sufra una paralización económica tan
grande.
Y por último,
mucho ánimo para todas las personas que estáis en vuestras casas: solos, con
vuestros hijos, separados de vuestros padres, conviviendo con vuestros
compañeros de piso, lejos de vuestro marido/mujer porque trabajan fuera de
vuestras ciudades, pero, principalmente, muchísimo ánimo para todas aquellas
mujeres que tienen que traer al mundo a sus bebés en estos durísimos momentos y
a lo largo de este año. ¡Sois muy valientes!
Espero que
pronto podamos tener mejores noticias… ¡Un saludo a todos!
Pdt: Acaban de anunciar la prolongación del Estado de Alarma a 15 días más.
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