jueves, 23 de enero de 2025

La cuesta de enero y el vacío laboral...

Hola a todos,

¿Qué tal se os está dando la cuesta de enero? La verdad es que siempre enero se hace muy eterno y largo. Parece una de esas películas aburridas que por más que pasan los minutos parece que nunca va a tener fin.

En la entrada de hoy os traigo un problema que parece que viene siendo habitual en el mundo laboral y es el tema del vacío laboral. Sí, igual no habéis escuchado este término y efectivamente es porque creo que me lo acabo de inventar, pero desgraciadamente es algo que existe. Tampoco lo quiero llamar acoso laboral porque realmente no se si es así como su propio nombre indica, asique prefiero llamarlo: vacío laboral.

¿Qué es el vacío laboral? Según mi entendimiento, surge cuando entras nuevo a una empresa y las personas más antiguas que están allí trabajando, no les hace gracia que vengan los nuevos. Concepto muy resumido, pero que quiero explicar más detenidamente a continuación.

Cuando entras nuevo a una empresa, siempre entras con dudas, sobre todo cuando ya te has recorrido varias empresas. No sabes si será mejor o peor, estás intranquilo hasta que pasa el primer mes donde parece que se han volcado en intentar enseñarte algo que no hace falta porque yo ya vengo con la lección bien aprendida (y mejor que ellas). Parece que la cosa va mejor, pero se empieza a complicar según van pasando las semanas… comienzas a ver las malas contestaciones entre las compañeras veteranas hacía otras nuevas, pero piensas que será algo puntual y no lo tienes en cuenta.

Cuando ya llevas tres meses y ves que siempre las malas contestaciones son de las mismas veteranas hacía las nuevas (y me incluyo), pues mira ya empiezan a tocarte las narices. Lo primero porque todas son mujeres y, cuando fui a la entrevista para conseguir el trabajo, lo primero que pensé fue: “¿Todo mujeres? Menudo nido de víboras que hay aquí”. Parece que la intuición que tenemos las mujeres no falla. Aún así, quise darle la oportunidad al sitio y probar la experiencia.

Ya os digo que, aparte de malas contestaciones, hacía mí y mis compañeras, son malas caras y malos gestos también. Llega un momento que te cansa y, sinceramente, jamás pensé que un trabajo me iba a quemar tanto en apenas tres meses, pero la actitud de la gente no ayuda. Mi jefe está muy contento conmigo y con mi trabajo, pero a mí eso ya no me vale si no tengo paz mental y tengo que estar todos los días pensando en qué sucederá hoy y con qué mierda saldrán.

No es posible que en 2 semanas, he tenido 14 encontronazos con una de ellas…Yo soy una persona pacifica y hago mi trabajo, pero lo que me sienta mal es que vengan a darme lecciones de cosas que creen que lo saben cuando no es verdad… Entonces ya me planteo que lo que sienten es miedo de las nuevas personas y las atacan porque ven peligrar su culo en la empresa porque no saben nada del trabajo que están ejerciendo y pueden ser descubiertas en cualquier momento… Como está pasando…

Hay cosas que no se deben tolerar y menos en un trabajo. Puedo actuar de dos maneras: 1-Me pongo a su altura y suelto pullitas para ver si se dan por aludidas y revientan, o 2-Les doy la razón como a los tontos y ya está. Llevo ya unos días que estoy tomando el camino de la segunda opción. Me estoy haciendo la tonta, la recién salida de estudiar para que vengan las “manejantonas” a decirme como ven ellas las cosas y como se hacen según su criterio…

Otra cosa que sucede es que parece que nos tratan como si fuéramos sus criadas, nos piden cosas que tienen que hacer ellas, para luego ellas dar la última revisión y nos echan muchas broncas cuando algo no está todo perfecto. La perfección para ellas es no tener que revisar nada para tocarse más las narices de lo que se la tocan…

También os digo, que las nuevas nos estamos uniendo para hablarlo con el jefe y a ver si puede tomar alguna medida al respecto… Todas estamos mal y pensamos lo mismo acerca de las otras. Luego se extrañan que las nuevas que llegan no quieran estar allí… ¿Pero cómo van a querer estar allí con la negatividad que sueltan?

Está tocando un mes con mucho trabajo aunque tampoco confío en que las cosas vayan a ir a mejor. Solo se que siempre me tocan cosas negativas y de este estilo en todos los trabajos donde he estado. En la próxima entrada os cuento más… ¡Y que se acabe enero ya!

¡Un saludo a todos!